Aunque el conjunto de las y los jóvenes latinoamericanos están afectados –en diversas medidas y a través de diversas modalidades- por importantes cuadros de exclusión social y por visiones esteriotipadas que los ven como “buenos para nada” y “culpables” hasta que demuestren su inocencia, esto es particularmente visible en el caso de las y los jóvenes que ni estudian ni trabajan, quienes últimamente han pasado a tener un lugar destacado en la agenda pública de nuestros países, aunque todavía no son objeto de políticas ni mucho menos sujetos de las mismas.
Relación del insumo con el Banco del Conocimiento